Día internacional de las personas mayores
Apoyamos a las personas mayores con discapacidad intelectual para paliar las consecuencias de la pandemia
Desde Down Madrid prevemos atender a personas mayores con discapacidad intelectual, consideradas en riesgo social a consecuencia de la crisis sanitaria por la COVID-19, a partir del ‘Proyecto de gestión de la triple vulnerabilidad ante el COVID-19: Edad avanzada, discapacidad intelectual y padres muy mayores’, en pleno funcionamiento desde el mes de junio.
Según el coordinador de Envejecimiento Activo y Vida Adulta, Jorge González, las personas con discapacidad intelectual mayores de 40 años “necesitan urgentemente un número importante de acciones que ayuden a paliar esta situación de gran vulnerabilidad”, debido a su edad, nivel de discapacidad y grado de dependencia. Por ello, gracias a la colaboración de la empresa Bridgepoint, hemos desarrollado un proyecto dirigido a minimizar el impacto social e incrementar la autonomía personal de este sector poblacional muy dependiente de la ayuda externa.
Desde Down Madrid reforzaremos la atención a las personas mayores con discapacidad y sus múltiples necesidades, acrecentadas con la actual emergencia sanitaria por el coronavirus, con una intervención directa. Se apostará por la formación de habilidades de autonomía personal, el apoyo psicológico y el asesoramiento laboral.
Al respecto, calculamos que un 20% de las personas con discapacidad intelectual van a perder su empleo. “Necesitamos apoyar a estas personas para que sigan teniendo una rutina en el periodo de ‘parón laboral’ y continúen formándose para que puedan conseguir un nuevo empleo lo antes posible”, ha concretado Jorge. En paralelo, también se han detectado otras realidades que requieren igualmente de atención y no pueden pasar desapercibidas, como son la falta de apoyos a personas mayores con discapacidad intelectual cuyos cuidadores principales son muy mayores o están enfermos y, por lo tanto, también son más vulnerables.
En esta línea, el coordinador de Vida Adulta y Envejecimiento Activo ha detallado que “estas personas mayores con discapacidad intelectual son las que menos están saliendo y más dificultades van a tener para hacerlo por el miedo a infectarse y poner en riesgo a sus familiares tan mayores, pero sí requieren de apoyo en tareas del hogar y a nivel psicológico, así como continuar con sus tratamientos de estimulación”. Para evitar que sufran un deterioro importante e irreversible de sus competencias, el proyecto garantizará una atención completa y personalizada.
Todo ello convive con un contexto extraordinario, puesto que cada vez hay más personas con discapacidad intelectual en la etapa de la vejez, debido al incremento de la esperanza de vida de este sector poblacional. “A diferencia de las personas con discapacidad intelectual que nacen actualmente, nuestros mayores no han contado con tanta estimulación a lo largo de su vida”, ha avanzado Jorge, quien ha especificado que ello les convierte en más dependientes y con necesidades especiales. “Enseñarles a responder y adaptarse a las exigencias surgidas por la COVID-19 es todo un reto”, ha considerado.
Experiencias vividas durante el confinamiento por familiares de personas con discapacidad muestran esta necesidad, como es el caso de Inma Elizalde, expaciente de coronavirus, y su hermano Francisco Elizalde, de 51 años y con discapacidad intelectual. Ambos se encontraban solos en Madrid y sin familia y, a pesar del apoyo proporcionado por la entidad, Inma reconoce que estuvo “intranquila” ante un posible ingreso hospitalario porque nadie podía atender a su hermano si la aislaban.
Por otra parte, la pandemia también ha cambiado las rutinas y los hábitos de toda la población, independientemente, de la edad. Sin embargo, estos cambios afectan de diferente forma si se tiene en cuenta el componente de discapacidad y grado de dependencia. “Es muy importante que nuestros mayores retomen sus actividades y continúen sus tratamientos para que no padezcan un retroceso de sus habilidades y, sobre todo, para que mantengan una adecuada salud mental”.
ACCIONES DEL PROYECTO
Hasta el momento, hemos finalizado la primera fase del proyecto con la identificación de situaciones de riesgo social y estamos sumergidos en la reincorporación de los mayores a sus actividades, focalizando esta fase en el aprendizaje y la interiorización de las medidas y protocolos de seguridad, tanto en el centro como en el transporte.
A su vez, hemos ofrecido un nuevo servicio este curso ‘Aula digital para el empleo’, que busca ofrecer un programa formativo basado en el aprendizaje de competencias digitales y otras competencias necesarias para adaptarse a la nueva situación del mercado laboral.
En el Día Internacional de las Personas Mayores, celebrado este jueves, hemos querido recordar a las personas mayores con discapacidad intelectual y a sus familiares y cuidadores que no están solos ante las adversidades. Siempre contaréis con el respaldo, la entrega y la atención del equipo humano de Down Madrid. Esto lo superaremos todos juntos.